Todo el tiempo nos preocupamos por el que dirán. Vivimos pendientes de qué piensan los demás de nosotros. Pensamos si nos quieren, si nos aprecian, si piensan bien de nosotros y si creemos que eso es así estamos contentos. Pero si pensamos que no nos quieren, que no nos aprecian, que no piensan bien de nosotros, estamos mal y hasta parece que la vida no merece vivirse. Esta es la razón por la que tantas personas pasan de un estado de alegría y euforia a un estado depresivo. Su estado de ánimo depende de dos cosas muy volubles: su pensamiento y el pensamiento de los demás. No siempre que pensamos que los demás piensan bien de nosotros es cierto. Ni tampoco lo contrario. A veces pensamos que los demás están sintiendo o pensando mal de nosotros y no es verdad tampoco. Cuanto más nos preocupamos de que nos vean bien los demás, menos nos preocupamos de serlo realmente. Cuanto más nos preocupamos de "caer bien" a los demás peor nos caemos a nosotros mismos. Porque inte...
Te invito a que comiences a recorrer un maravilloso camino hacia el encuentro contigo misma. Un viaje de autoconocimiento que te llevará a romper los límites que te has auto-impuesto, a seguir creciendo como persona y a vivir en plenitud. Iniciemos juntas y con mucho amor este hermoso viaje sacando el máximo provecho a tu aquí y ahora.