Uno de nuestros objetivos será centrarnos en cómo mejorar nuestra autoestima. Por esta razón es necesario que veamos en detalle de qué se trata y cuál es la importancia que tiene en nuestra vida.
La autoestima es el aprecio y valoración que la persona tiene por sí misma. Nos ayuda a definir nuestra personalidad ya que influye en casi todo lo que hacemos. Por ejemplo, influye en las decisiones que tomamos, en cuáles son nuestras aspiraciones y en qué es lo que nos gusta o no. En otras palabras, la autoestima es la valoración que hacemos de nosotros mismos, el cómo nos vemos, cómo nos sentimos y cómo sentimos que nos ajustamos dentro del mundo en el que vivimos.
La autoestima es fundamental en nuestra vida ya que puede determinar como son nuestras actitudes, el cómo nos relacionamos con los demás, el cómo nos proyectamos, el cómo resolvemos nuestros problemas y cómo sobrellevamos nuestras frustraciones. De nuestro nivel de autoestima dependerá lo que queremos ser y lograr en la vida.
Nosotros somos los responsables de definir nuestra autoestima, sin embargo no es fácil conseguir tener una adecuada autoestima, ya que existen diversos procesos internos mediante los cuales llegamos a la aceptación de todo lo que forma parte de nosotros, es decir: nuestra imagen física, nuestras virtudes y defectos, nuestras capacidades, etc.
Si logras quererte y ser feliz como eres, con tus defectos y virtudes, conseguirás tener una alta autoestima, un concepto y una valoración positiva de ti misma. Estos aspectos tienen un rol fundamental para que puedas triunfar en la vida, para lograr todo lo que te propongas y sobre todo, para que seas feliz. Es importante señalar que una autoestima alta también influirá en el concepto que las demás personas tendrán sobre ti.
De igual forma, una autoestima baja probablemente se traducirá en fracasos y frustraciones. Una percepción negativa de nosotros mismos nos impedirá lograr todo aquello que nos propongamos y también influirá en como nos ven las demás personas. Si yo no confío en mi misma es difícil que los demás confíen en mí. Así caemos en un círculo vicioso, ya que si los demás no me valoran se refuerza y acentúa aún más la valoración negativa que tengo de mí misma.
En resumen, la persona con buena autoestima es capaz de enfrentar y resolver los problemas que la vida le plantea. Por otra parte, la persona con baja autoestima tiene una visión deformada de lo que es y lo que puede llegar a ser y eso lamentablemente la puede llevar a la derrota y el fracaso.
A partir de lo anterior, podemos concluir que el amor y la valoración que uno tiene de sí mismo, son fundamentales para la formación de una persona, para su desarrollo personal y social.
Ahora te invito a continuar recorriendo este camino por el que quizás nunca hayas transitado pero que sin duda te permitirá mirar tu vida desde otra perspectiva. No olvides que durante este recorrido conocerás la historia de amor más grande que siempre deseaste vivir... ¡la tuya! El amor hacia ti misma es el motor que te permitirá renovar tu vida desde este mismo instante.
Hola Carolina! que maravilla de blog, tirón de orejas para ti por no avisarme, decí que como soy muy chusma me vine a buscarte y te encontré aquí y estoy alucinada!, tendré que volver con calma y tranquila para aprovecharme de toda tu sapiencia!
ResponderEliminarUn gran abrazo
María de innspiradas.blogspot.com
Hola María! jaja me alegra que hayas seguido mi huella hasta acá! Eres muy bienvenida. Cuando tengas un tiempo para ti entre tanta maravilla que me imagino haces, me vienes a ver ¿te parece? Te felicito por tu blog, es muy lindo y con muy buenas ideas para todas nosotras! Te dejo un abrazo y te sigo encantada!!
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