Mujeres sin límites

Hoy quiero reflexionar sobre aquellas cosas que suman energía positiva a nuestra vida. Me refiero a lo que nos hace sentir bien y nos nutre como persona. Independiente de que por obligación tengamos que hacer algunas tareas que no nos gusten o que tengamos que relacionarnos con personas que nada nos aportan, tenemos que intentar mantener un equilibrio dándole cabida siempre a eso que suma; es decir, que aporta bienestar a nuestra vida.  Ahora te invito a que hagas un balance de lo positivo y negativo que hay hoy en tu vida.  Para realizar este ejercicio te pido que por escrito realices un listado de aquellas cosas que consideras que suman a tu vida y por otro lado lo que sientes que es energía negativa.  ¿Hacia qué lado se inclina la balanza?¿Hacia lo positivo o negativo?  ¿Qué podrías hacer para aumentar la cantidad de cosas que sumen a tu vida? ¿Les dedicas tiempo suficiente a lo que te brinda bienestar? ¿Sientes que es necesario dedicarle más tiempo? ¿Qué cosas que restan energía po

Es luz que ilumina mi sendero en cada paso que doy. Esperanza en los momentos difíciles de sobrellevar. Confianza para concretar mis proyectos. Seguridad de sentir que voy por el camino correcto. Fuerza que me impulsa a hacer realidad mis sueños. Bastón para mi corazón cuando se siente abatido. Prudencia para tomar decisiones. Energía para derribar muros y ganar batallas. Fortaleza para resistir tempestades. Libertad para actuar según mi voluntad. Remedio que cura mis pesares. Certeza en que todo saldrá bien. Equilibrio y armonía con lo que me rodea. Paz y tranquilidad conmigo misma. ¡Nacer de nuevo cada día!

Siempre después de una oscura noche llega la claridad de un nuevo día. Siempre detrás de un problema existe una solución. Siempre se puede escapar de un laberinto por muy difícil que parezca encontrar la salida. Siempre que exista confianza en uno mismo, habrá paz en el propio corazón. No te desanimes ante la adversidad. Si te caes vuelve a ponerte de pie. Si has cometido un error o has sufrido una derrota no te desalientes. No abandones el camino y sigue avanzando con más coraje hasta lograr tus objetivos. Los grandes desafíos son para grandes espíritus. Siempre detrás de una fuerte tempestad viene la calma. Toma el timón de tu vida agarrándote con fuerzas a la fe y a la esperanza.