Durante los últimos meses en muchas ocasiones tuve la intención de volver a escribir, pero desistí porque sentía que no tenía suficiente inspiración para hacerlo o porque el sinfín de tareas que tengo que asumir a diario contribuía a que no llegara ese momento por falta de tiempo.
Pero finalmente hoy he tomado la decisión de hacerlo. He vuelto a escribir porque no quiero estar atrapada en mi cotidianidad. Porque el que sólo sobrevive se olvida de su verdadera esencia, se olvida de aquel tesoro que está dentro de uno y que finalmente es la llave de nuestra libertad.
Es tan valioso el poder hacer algo más en la vida que simplemente sobrevivir. Es tan valioso el darnos tiempo para poder ser nosotros mismos. El tener ese valioso tiempo nos permite sentir, pensar, analizar, reflexionar, para finalmente poder decidir cuál será nuestro camino a seguir, el que nos llevará a disfrutar de nuestra vida plenamente; es decir, siendo y haciendo lo que realmente queremos.
Lamentablemente por mucho que queramos tener todo bajo control siempre nos encontraremos con situaciones que escapan de nuestras manos, que son hechos imprevisibles que nos desestructuran y desarman. Lo importante es el cómo enfrentamos estas situaciones, tan complicadas a veces.
Personalmente he ido aprendiendo que lo ideal es intentar siempre centrarnos en nuestro interior. Enfocarnos en nuestras propias posibilidades y en nuestros propios recursos para poder seguir avanzando, sea cual sea el obstáculo frente al cual nos enfrentemos.
Si aceptamos la realidad que se nos viene encima utilizando hasta el máximo nuestras posibilidades todo probablemente será mejor. Y por sobre todo tenemos que tratar de evitar que nuestro pensamiento haga que toda esa tristeza, sufrimiento, dolor o decepción sea aún peor. Tratar de escapar de todo lo negativo que nos rodea y no padecer más de lo necesario nos ayudará a sobrellevar de mejor manera lo negativo que estemos viviendo.
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por tu presencia.